Significado de Autonomía

El concepto de autonomía es amplio y abarcativo, y es funcional tanto para individuos, organizaciones y formas de gobierno, pero en general tiende a hablar siempre de la misma cuestión: la capacidad de cualquiera de esas entidades de conducirse por sí mismo, generando reglas y condiciones para mantenerse en esta situación.

Autonomía individual

En cuanto a las cuestiones de índole individual, se dice que una persona es autónoma de manera legal y también de manera económica. La primera tiene que ver con un desarrollo del individuo hasta convertirse en adulto responsable ante las leyes. Esto se puede adelantar, si los tutores legales de la persona lo autorizan mediante una instancia judicial a que se emancipe. De todos modos, la persona al crecer y convertirse en mayor de edad, se convierte automáticamente en un individuo con deberes y obligaciones, es decir autónomo.

Este concepto se diferencia de la heteronomía, que indica que una persona recibe mandatos de otra entidad para actuar. En su ámbito personal, mientras posea suficientes ingresos como para establecerse económicamente, también goza de autonomía para poder vivir en sociedad. Uno de los casos que ante la Justicia niega la autonomía, es la afección mental que pueda sufrir una persona. Otra instancia de autonomía individual es la moral: se dice así de la persona que puede juzgar por sí misma la ética, los valores y la moralidad de las cosas y los pensamientos.

(Significado de autonomía. Ámbito laboral y económico.)

(Significado de autonomía. Ámbito laboral y económico.)

Autonomía como forma de gobernar y representar

En cuanto a los gobiernos, ya sea a nivel municipal o provincial (también llamado en algunos lugares ‘estatal’), para que sea autónomo se tienen que dar una serie de condiciones particulares. Tiene que tener una identidad adquirida, una función o demanda específica para que se reconozca su autonomía, y debe poder funcionar al margen de un gobierno centralizado.

En algunos países del mundo, para evitar un mal mayor, se brinda la posibilidad a ciertas zonas, sobre todo las que gozan de un contexto histórico de funcionamiento separado, de que puedan gobernarse a sí mismas, siempre y cuando acepten formar parte de una organización mayor. También existe una instancia de autonomía institucional, cuando la Ley estipula y permite que existan determinadas organizaciones que cumplan funciones separadas de cualquier mediación gubernamental.

Autonomía en Universidades

Resulta muy interesante analizar el concepto de autonomía universitaria. No en muchos países, el Estado nacional permite que sus Universidades se auto gobiernen. Pero donde sucede, es muy rico el análisis para observar cómo se comporta una entidad que maneja leyes, economía y funciones propias. El funcionamiento se da de la siguiente manera: el Estado provee un monto determinado de dinero anualmente, dentro de un presupuesto estipulado.

Con ello, la Universidad dispone como mejor considere de partidas para todas sus facultades, docentes, refacciones y demás. También toma decisiones académicas, políticas, de plataformas de estudio, contratación de docentes, revisión de conductas estudiantiles, etcétera. Cuando una Universidad despilfarra o toma malas decisiones, posiblemente resulte intervenida y sus autoridades sean modificadas, pero de lo contrario, la vida universitaria se mantiene sanamente al margen de las cuestiones políticas a nivel estatal.

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