Significado de Ciencia

¿Qué es la Ciencia?

Significado: Conforman una ciencia el conjunto de conocimientos adquiridos a través de la observación, el estudio o la práctica, comprobados a través de la metodología científica y que explican principios o leyes generales acerca del universo, incluyendo el comportamiento de los seres vivos. La palabra proviene del latín y significa ‘saber’. No es sencillo establecer en qué momento de la historia surge la idea de conocimiento científico, se asume que esto tuvo que haber ocurrido cuando las personas notaron que numerosos fenómenos solían relacionar una causa con un efecto.

El motor de la historia de la ciencia fue el interés de las personas por comprender el mundo y lo que lo rodeaba. Durante el largo proceso en el que toda la comprensión del mundo estuvo cercada por la supremacía de la religión, la ciencia se ocupó simplemente de entender intelectualmente el mundo, mientras que a partir de la Revolución Industrial y de la difusión de las ideas iluministas, la ciencia se convirtió en la base que rige la evolución del mundo moderno.

(El Significado de ciencia. Ilustración.)

El método científico

Los conocimientos científicos pueden ser puestos a prueba atendiendo a determinados criterios uniformes. Así, las teorías que son elaboradas en el marco de una ciencia pueden ser cuestionadas en cualquier momento y en cualquier lugar. La ciencia presupone la existencia de un método reglado, que implica una serie de pasos a través de los cuales se llega a una conclusión. Esos pasos comienzan por la observación de un fenómeno, luego la elaboración de la hipótesis de explicación, luego la comprobación de la hipótesis a través de los experimentos, el contraste de los resultados con la hipótesis planeada y luego la conclusión, o bien el regreso al momento en el que se busca una explicación, pero sin dejar de experimentar nuevamente teniendo en cuenta que el conocimiento científico debe ser general y las teorías deben valer para todos los casos.

Las ciencias que buscan explicaciones para los procesos sociales suelen ser las más complicadas para abordarlas desde el método científico, por lo que a menudo acuden a otros procesos, como el estadístico. También se recurre a modelos de estudio o de análisis, en los que la realidad, por demás compleja, se simplifica de algún modo y luego en ese universo simplificado se aplica el método científico.

Clasificación de los tipos de ciencias

La ciencia puede clasificarse de distintos modos, pero el más tradicional es de acuerdo al campo de investigación en el que se desenvuelve.

• Las ciencias exactas o formales son las que se orientan a las formas válidas de inferencia, por lo que su contenido es formal y eterno: aquí son muy valiosas las demostraciones, y cuando algo aparece demostrado en términos matemáticos se espera que valga para todos los tiempos, pues se encuentra demostrado bajo otras premisas también demostradas.
• Las ciencias naturales buscan explicar lo que sucede en la naturaleza, y la tecnología es una herramienta más que importante por lo que su avance suele estar condicionado al progreso técnico.
• Las ciencias sociales se ocupan de aspectos de la cultura y la sociedad, por lo que son las más alejadas de las formales ya que su profundización no llevará a la falsabilidad plena (es decir, sus conclusiones no podrán ser contrastadas completamente). De todos modos, las ciencias sociales se ocupan de alcanzar una mayor comprensión del ser humano y de sus comportamientos, sin establecer una visión completa y permanente sobre él.

El progreso científico genera la posibilidad de significativos avances en las capacidades del género humano en general, pero también suele impactar en la vida de cada individuo. La ciencia de la salud es el mejor ejemplo de cómo los progresos pueden llegar a ser útiles para una gran cantidad de personas. En muchos casos, los países entienden que es necesaria su intervención y su financiación para promover la investigación científica, al asumir que esa intervención podrá redundar en beneficios para todos los ciudadanos, y que tal vez no resulte de interés invertir en esa investigación para una empresa o un particular. Es por esto que la mayoría de los países en algún momento deciden crear ministerios o secretarías de ciencia, que junto a la labor de las universidades, fomentan la investigación.