Significado de corrupción
El término corrupción encuentra sus orígenes en la palabra griega corrumpere, que significa arruinar o echar a perder. Podemos decir que todo lo que se haya corrompido ya no sirve, está arruinado. El concepto de corrupción está relacionado con el honor y la moral destruidos o deshechos.
Cuando perdemos la integridad, lo vemos reflejado en los hechos, nuestro desempeño y rendimiento ya no son los mismos y es usual que resulten afectadas otras personas.
Los corruptos
Las personas corruptas son egoístas y ambiciosas, sólo buscan su propio beneficio, así signifique perjuicio para los demás. Para lograr sus objetivos, ellas ignoran o traspasan las normas, sean del tipo que sean.
Un individuo corrupto que infringe las normas religiosas será denominado hereje, si las normas ignoradas son las sociales, entonces será un marginal y, si las normas son legislativas, será llamado criminal.
Las formas de la corrupción
Los abusos de poder, la malversación de fondos, las omisiones de información son formas de corrupción y pueden suceder en cualquier clase de organización pública o privada.
En el caso de los Estados, se puede ejercer la corrupción abogando por intereses externos u opuestos a los de la nación y el pueblo, es decir que cuando un diputado hace uso de su poder para el beneficio de una multinacional, está siendo corrupto. Vemos así que el concepto de corrupción tiene una profundidad y abarca diferentes tipos de actos.
Entendemos una moral afectada como algo más complejo que la transgresión de normas o tendencias a la ambición y desviación de fondos. Sobornar a alguien o hacerlo cómplice de una acción incorrecta es corromperlo, volverlo inmoral.
Características de la corrupción
La corrupción implica una falta de empatía o interés por los afectados de nuestros actos. Para muchos, este tipo de accionar es un medio temporal que se utiliza para alcanzar un fin determinado, y después se abandona. En ese caso el individuo elige usar métodos corruptos para sus fines a sabiendas de sus características poco éticas y sus posibles consecuencias.
El problema social de la corrupción
Para ser un problema social, la corrupción debe afectar a una gran parte de la sociedad. Un problema local o que no excede los límites de una organización no puede ser considerado social, ya que no afecta a las masas. El número de los afectados junto con sus reacciones, reclamos y acciones políticas para cambiar la realidad es de suma importancia.
La sociedad puede no condenar la totalidad del accionar corrupto, sino solo una parte que considere de especial gravedad. Factores como la alevosía, la crueldad y el abuso de poder están relacionados con las reacciones de la sociedad ante los hechos de corrupción.
Las personas afectadas por la corrupción de los poderosos deben creer que existen soluciones viables, por lo que es necesario que tomen medidas como sociedad para erradicar ese conflicto.
El conflicto entre la sociedad y los dirigentes corruptos contrapone sus intereses y dificulta la representatividad de la democracia.
Las medidas necesarias para deshacer el motivo del conflicto incluyen conocimientos teóricos y tecnológicos para proponer reemplazos de las ideas o sistemas anteriores.
El carácter dinámico de los problemas sociales implica variaciones en la gravedad de los problemas de acuerdo con la conciencia colectiva, la aparición de nuevos valores deseables y la desaparición de estándares de conducta obsoletos. Las sociedades mutan con el paso del tiempo y también lo hacen sus problemas.
El sentido común, las nociones y los conocimientos sobre igualdad de condiciones fueron ampliándose, por lo que las situaciones que en el pasado eran aceptadas y hasta celebradas, hoy resultan conflictivas y son reformadas.
La corrupción será considerada un problema social por los afectados y en las sociedades de moral estricta y valores democráticos sólidos. Las consecuencias de la corrupción también pueden devenir en problemas sociales. Los dirigentes que abusen de su poder o desvíen fondos pueden provocar un problema social como la falta de insumos hospitalarios.
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