Significado de enamoramiento

El término enamoramiento hace referencia a un estado de ánimo que proviene de la felicidad que siente una persona al ser atraída por otra.

La palabra enamoramiento se entiende como un conjunto de sensaciones y emociones que pueden llegar a experimentarse tanto física como mentalmente.

Características del enamoramiento

Este estado se da cuando una persona siente amor hacia otra, es decir, se puede sentir amor por la familia, los hijos, los amigos, pero cuando se está en pleno enamoramiento es la intención de querer llegar a formar pareja con una persona específica.

No existe una definición clara y concreta, pero la mayoría de las personas describe que cuando se siente el enamoramiento, muchos otros sentimientos comienzan a aparecer.

Se trata de sentir alegría, emoción, pasión y cariño cuando se ve a esa persona especial. Son sentimientos que no deben buscarse sino que deben aparecer solos.

Si bien el estar enamorado requiere una atracción física, no debe basarse en eso una relación, ya que una persona debe querer a la otra en todos los aspectos que la conforman, aspectos tanto externos como interiores, como pueden ser la personalidad, el propio estado de ánimo y demás.

Las etapas del enamoramiento

Existen etapas del enamoramiento que debería conocer, ellas son:

1. La primera etapa del noviazgo: Esta etapa se presenta desde el primer mes juntos hasta los dieciocho y treinta meses.

En estos primeros momentos que una pareja enamorada comparte, ambos deben sentir el deseo de querer estar el uno con el otro en todo momento y buscar la manera de concretar eso. Aquí no importa la edad, una persona enamorada vuelve a ser un joven adolescente siempre.

Muchos hablan de que la primera etapa de un noviazgo es la mejor, ya que se experimenta la pasión y fantasía sin necesidad de tener actividad sexual.

2. Esta segunda etapa abarca todo lo relacionado con la vinculación: Luego de cumplir entre los dos y tres años de noviazgo, la pareja comienza a sentir y buscar cierta autonomía, se trata de separar el «tú» y «yo».

Esto no implica dejar el amor a un lado, pero existe un cambio en el estado de la primera etapa a la segunda, la pasión se encuentra presente pero no con la intensidad de antes. Es fundamental en esta etapa no llegar a la rutina o acostumbramiento del uno con el otro, ya que esto implicaría el surgimiento de problemas futuros.

Cuando una pareja llega hasta este momento, lo más probable es que empiece a proyectar su futuro como la creación de un hogar o concretar el amor de diferentes formas, como el matrimonio.

3. En la tercera etapa probablemente ya estemos hablando de una convivencia: Muchas de las relaciones que superan los tres años, sienten la necesidad de buscar un lugar propio donde poder compartir y probarse como pareja permanente, si realmente se trata de su media naranja, y también formar una familia.

El decidir formar una convivencia es una decisión que requiere de mucha responsabilidad para una pareja, es necesario dejar de lado el egoísmo para intentar compartir todas las actividades que se necesitan en un hogar.

(Enamoramiento)

De no ser esto posible, comienzan a generarse conflictos como en cualquier convivencia y realmente es mejor evitarlos.

En esta etapa se trata de alimentar el amor en todos sus aspectos, poder sentir sincera felicidad al hacer cosas por el otro, al disfrutar ver su felicidad, esto hará que vivir en una casa con otra persona sea lo más confortable posible.

4. La cuarta etapa ya habla de una posible familia conformada: Generalmente, a partir del quinto año de noviazgo o tal vez matrimonio, una pareja suele hacerse la idea de poder tener ya a sus hijos y continuar con los proyectos que los incluye, como observar con plena felicidad su crecimiento y experimentando aquellos momentos que serán inolvidables, superando juntos cada obstáculo que se presente.

5. La quinta y última etapa se trata de la adaptación: Una vez que una pareja tuvo la oportunidad de formar un hogar, ver crecer a sus hijos y haber podido vivir todos los proyectos que alguna vez surgieron en el pasado, llega una etapa de adaptación.

La madurez de la pareja se hace presente y eso implica aceptar lo que esta misma trae con ella. El saber que se han podido vivir todos los sueños que alguna vez comenzaron en la primera etapa.