Significado de Promiscuo

¿Qué es «promiscuo»?

El origen de la palabra promiscuo poco tiene que ver con el sentido que se le da hoy en día a este término. Proviene del latín, y surge como una mezcla de dos vocablos que, traducidos, serían algo así como ‘mezclar hacia adelante’.

De esa misma raíz salen palabras del español como mixto y mestizo. Sin embargo, se utiliza el término para hacer referencia a aquellas personas que mantienen relaciones sexuales con varias personas distintas en un período corto de tiempo. La Organización Mundial de la Salud define a la promiscuidad como el mantenimiento de dos o más parejas sexuales distintas en un período de seis meses.

(Promiscuo es quien mantiene relaciones sexuales con varias personas en poco tiempo)

Rechazo a la promiscuidad

En muchos ámbitos la promiscuidad está mal vista y se la repudia abiertamente. La connotación negativa se relaciona, en primer lugar, con la asunción de que quien tiene numerosos compañeros sexuales difícilmente tenga un vínculo afectivo estable y profundo con alguien.

La ‘poligamia’, es decir, la vida marital con varias esposas, está aceptada en algunas sociedades, pero es de hacer notar que en ese caso  existe el consentimiento mutuo de todas las involucradas, que aceptan tal situación. De todos modos, la mayoría de las mujeres y los hombres de Occidente optan por la monogamia.

La promiscuidad no implica compromiso afectivo, sino solo las relaciones sexuales con compañeros diversos. Para las religiones occidentales, la promiscuidad es una de las mayores faltas que pueden cometer las personas, puesto que están olvidando el fundamental valor de la monogamia y con ello el del matrimonio, pieza fundante de toda familia.

La promiscuidad suele asociarse con un mayor riesgo del contagio de enfermedades de transmisión sexual (ETS). La mayoría de casos de cáncer de cuello uterino son causados por el virus del papiloma humano (VPH), por ejemplo, y casi el 100% de las mujeres que padecen esta enfermedad fueron contagiadas por sus parejas. La transmisión de este virus es principalmente por medio de las relaciones sexuales; por lo tanto a mayor número de parejas sexuales aumenta el riesgo de transmisión del VPH, y consecuentemente aumenta el riesgo de estos cánceres.

Afortunadamente hoy en día existen numerosos métodos de prevención de las ETS, como el preservativo. Pero es sumamente importante en este caso la concientización y la responsabilidad del individuo frente a cada nuevo encuentro sexual.

Difusión y debates en la sociedad

La promiscuidad se volvió más aceptada desde mediados del siglo XX, a partir de la liberación sexual. Sin embargo, no dejó de verse de forma diferente la conducta promiscua en los hombres que en las mujeres, asumiéndose en muchos casos que el hombre que frecuenta mujeres diferentes es un “conquistador” o “donjuán”, al tiempo que la mujer que frecuenta muchos hombres es una “perdida”.

Esto sucede por una conjunción de factores socioculturales, como los prejuicios sociales que pesan sobre uno y otro género, pero también porque la mujer está expuesta a quedar embarazada. Con los métodos anticonceptivos ocurre lo mismo que con la prevención de las enfermedades, que son seguros y efectivos (correctamente usados), aunque la relación sea con distintos hombres. En el Islam se acepta la poligamia, no la promiscuidad, la cual se cree que se evita obligando al hombre a mantener a todas sus mujeres.

Otros usos del término

La promiscuidad judicial es la que ocurre en el ámbito del derecho, cuando un magistrado tiene conocimientos sobre muchas ramas del derecho y por lo tanto puede atender a una gran cantidad de casos a la vez. En microbiología, se habla de promiscuidad bacteriana para referirse a la relativa facilidad con que algunas bacterias son capaces de aceptar genes extraños, de otros agentes microbianos, por el fenómeno de transferencia horizontal.